¡SORPRESA, VAS A SER MAMÁ!

Sábado 18 de enero de 2014. Recuerdo aquel día como si fuese hoy mismo. El día que me hice el test y me confirmó mis sospechas de días anteriores. ¡Iba a ser madre! Nuestro embarazo no fue un embarazo planificado, pero fue una sorpresa que nos hizo muy, muy felices. Por aquel entonces ya hablábamos de que no tardaríamos en ser papás y el destino quiso que fuese así, sin planearlo, sin nervios... 

Comento lo de mis sospechas porque unos días anteriores yo empecé a sentir ya los primeros síntomas... No creía que tan pronto se sintieran, pero sí es posible. Eran pequeñas señales que a mi me llamaban la atención, y que me hacían sospechar. Recuerdo que no se lo comentaba a nadie, que me quería esperar. Pero a solas en mi ordenador hacía lo que muchas, ¡buscar en Internet! Y aún más se confirmaban mis sospechas... Pero no me hice el test hasta después de la primera falta, tampoco quería pecar de imprudente. Nunca me había hecho antes un test, y para mí era algo bastante serio y emocionante y quería que fuese algo especial si se iba confirmando.

En la siguiente entrada especificaré más sobre esos primeros síntomas, y seguramente más de una se siente identificada, otras quizás no notaron nada hasta más adelante, y otras probablemente despejen algunas dudas como a mí me pasó. Pero lo mejor para salir de dudas mamis es esperar a la primera falta, hacerte un test en casa tranquila y para más seguridad, acudir a tu comadrona o ginecólogo.  

El día en cuestión fue un día lleno de emociones, yo estaba súper nerviosa. Resulta que llevaba ya dos días de retraso, quizás puedas pensar que no es mucho, pero créeme que era muy puntual, y además nunca antes había tenido esos síntomas antes de la "Miss Oportuna". Y justo era el cumpleaños de mi chico, así que no imaginé mejor sorpresa para él. Que para más información os digo que estaba deseando ser papi, así que imaginaros qué regalazo le hice por su 31 cumpleaños.

Ese sábado yo trabajaba hasta las 15:00. Pero le había preparado una serie de sorpresas para que cuando se despertase fuese disfrutando de los privilegios del día de su cumpleaños: un buen desayuno, un masaje... Yo le conté que tendría sorpresas a lo largo del día, y me decía que estaba muy emocionado. No se imaginaba cuánto lo estaba yo que tenía planeado el GRAN REGALO. Para mí era un poco complicado, él no sospechaba nada, pero yo tenía unas ganas enormes de salir de dudas ya. Pero a la vez tenía esa cosita como de miedo a lo desconocido... Claro, recordar que no es lo mismo cuando lo planificas y estas deseando hacerte el test. Para nosotros fue una sorpresa, una bonita sorpresa que podía pasar pero que no pasó hasta ese momento. Por otra parte tenía un poco de miedo que la sorpresa fuese un fiasco, porque sabiendo la ilusión que le daba a él me daba pena darle ilusiones y que el test luego diese negativo... Era como ponerle la miel en los labios y no dejarle luego probar...

Pero no, no fue así. Llegado el momento nos pusimos manos a la obra. Qué graciosa fue su cara cuando le pedí que me acompañase a la farmacia antes de irnos a cenar... Imaginad la cara que tenía cuando le dije TEST DE EMBARAZO. ¡Casi me coge en brazos para ir más rápidos! Como muchas ya sabréis, yo no lo sabía, el test es mejor hacerlo en ayunas con el primer pipí de la mañana, tal y como nos recomendó el farmacéutico, ¡¡¡pero no pudimos esperar!!! Mientras volvíamos a casa me hizo mil preguntas, le contaba mis síntomas... ¡Qué nerviosos estábamos! Quizás podría haberme hecho el test yo antes y si salía positivo haberlo envuelto y ¡tachánnnn! Pero no lo cambio por nada a compartir ese momento con él, juntos entre risas, piernas que tiemblan, alguna lágrima de emoción... Y AHÍ ESTABA, EMBARAZA 3+. No tardó ni un minuto en salir el resultado, ¡estaba embarazadísima! Lo que sentí en ese momento es difícil de describir, pero sobretodo alegría. Dentro de mí se estaba haciendo una personita creada desde el amor. Y con todo nuestro amor la cuidaríamos a partir de ese momento. 

 

Ya después de la emoción, los abrazos, los besos, los te quiero... Fuimos a celebrarlo en la cena, aunque tampoco queríamos hacernos muchas ilusiones, por lo que pueda pasar... Pero ese día fue bastante difícil controlarse y no ser monotemáticos en la conversación. Un nuevo mundo desconocido para nosotros empezaba a formar parte de nuestras vidas. Una nueva aventura para disfrutarla de principio a fin.  

YA SEA QUE TU EMBARAZO FUE PLANEADO, O QUE LLEGASE SIN PLANIFICACIÓN, LO QUE SÍ ESTÁ CLARO ES QUE A PARTIR DE AHORA TU VIDA YA NO SERÁ LA MISMA